La oveja churra
Esta raza de ovina autóctona de la región de Castilla y León (España), tiene una capacidad de producción mixta (carne y leche), en el grupo de la raza de ovejas de lana basta y cola fina, de la cuenca mediterránea y de la que se obtienen principalmente dos productos de alta calidad:
- El lechazo churro, que dispone de figura de calidad en protección: "I.G.P. Lechazo de Castilla y León".
- El queso de oveja castellano, que tiene un gran reconocimiento como marca.
Los animales de raza ovina churra se caracterizan por proporciones largas y tamaño mediano, con una peculiar pigmentación concéntrica en negro.
Se caracteriza esta oveja por su entorno rústico, capaz de recorrer largas distancias en busca de alimento, tolerar temperaturas extremas y estar perfectamente adaptada al medio en el que vive.
Esta raza de oveja autóctona de Castilla y León, tiene gran presencia en las provincias de Burgos, Palencia, León y Zamora. En la provincia de Zamora destaca una variedad de la oveja churra que se denomina "oveja churra sayaguesa".
Excepcionalmente, hallamos dos variedades fuera de Castilla y León:
- En el Valle de Tena (Pirineo aragonés) que es la "oveja Churra Tensina" de la que quedan unos 3.000 ejemplares y se ha creado una asociación para la repoblación de esta variedad de oveja, realizando un gran esfuerzo y dedicación para evitar la desaparición de esta variedad de oveja.
- En Valle del Guadalquivir, la “oveja Churra Lebrijana”, de la que apenas quedan ejemplares de esta variedad.
Se tenían estas ovejas en las explotaciones agrícolas del campo hasta finales del siglo, obteniendo la leche que les sobraba después de sacar una cría.
Es a partir del siglo XX cuando comienzan a aparecer los primeros planes de mejora, y se pone en marcha diversos organismos y entidades como la Asociación de Criadores de Raza Ovina Churra (ANCHE) que organiza y desarrolla el Control de Rendimientos de esta Raza. Esta entidad tiene a todos los ovinos identificados electrónicamente.
La evolución del censo de estos ovinos, a partir de la mecanización del campo, la revolución en la industria y la expansión de la especie porcino y ave es regresiva.
Elegir el ganado ovino para producción, tiene fundamentos sólidos por un trabajo continuado y fiel de los ganaderos apostando por un sistema de producción (cantidad y calidad) para conseguir la comercialización de productos de alta calidad.
